“Creo que me he cogido el virus”, “Pienso y leo sobre la crisis del Coronavirus todo el día”, estás y otras situaciones que dicen que debes tomar medidas psicológicas por tu salud mental.
Mucho hemos escuchado estás últimas semanas sobre la crisis del coronavirus y definitivamente que es una situación sin parangón reciente para todos nosotros. No obstante, debemos estar alertas, no solo de las medidas de auto prevención contra el virus sino de otras medidas, de las cuales se habla poco, como son las medidas que debemos tomar en estos casos para cuidar nuestra salud emocional.
Con el afán de ayudarnos hemos recogido el comunicado que ha lanzado el Colegio Oficial de Psicología de Madrid, quienes nos hacen recomendaciones para afrontar de forma eficaz el malestar psicológico generado por el brote de Coronavirus (COVID-19). Dependiendo de la situación en la cual se encuentre, así mismo se adaptan las recomendaciones, no es lo mismo ser paciente con COVID-19 positivo, que estar en casa teletrabajando.
Esperamos que estás recomendaciones sean de ayuda.
¿Cómo sé que el tema del COVID-19 está perjudicando mi salud mental?
En ese sentido, el comunicado detalla una serie de situaciones que se identifican claramente dependiendo de si estas o no contagiado.
No estoy contagiado con la enfermedad
En caso de que no esté contagiado, pero está sintiendo una serie de emociones de alta intensidad o persistentes como:
- Nerviosismo, agitación o tensión, con sensación de peligro inminente, y/o pánico.
- No puedes dejar de pensar en otra cosa que no sea la enfermedad o, la preocupación por enfermar.
- Necesitas estar permanentemente viendo y oyendo informaciones sobre este tema.
- Tienes dificultad para concentrarte o interesarte por otros asuntos.
- Te cuesta desarrollar tus labores cotidianas o realizar tu trabajo adecuadamente; el miedo te paraliza.
- Estás en estado de alerta, analizando tus sensaciones corporales, e interpretándolas como síntomas de enfermedad, siendo los signos normales habituales.
- Te cuesta controlar tu preocupación y preguntas persistentemente a tus familiares por su estado de salud, advirtiéndoles de los graves peligros que corren cada vez que salen del domicilio.
- Percibes un aumento del ritmo cardíaco, respiración acelerada (hiperventilación), sudoración, temblores sin causa justificada.
- Presentas problemas para tener un sueño reparador.
En caso de que presente uno o varios de estos síntomas o sensaciones, los psicólogos hacen las siguientes recomendaciones:
- Identifica los pensamientos que puedan generarte malestar. Estar pensando en la enfermedad de forma constante puede hacer que aparezcan o se acentúen síntomas que aumentan de forma involuntaria tu malestar emocional. Evade ese tipo de pensamientos.
- Reconocimiento y aceptación de las emociones. Lo primero que hacemos es negar que tenemos esas emociones que afectan negativamente nuestra salud mental. Por tanto, una de las recomendaciones es que no solo reconozcamos estas emociones, sino que las aceptemos e incluso que las compartamos con personas de confianza. En estos momentos debemos buscar ayuda.
- No aceptes toda la información que leas como válida. Lo primordial es cuestionarse, buscar e ir a datos fiables, de medios oficiales o científicos. Evita la información y las imágenes alarmistas.
- Información realista y adaptada al nivel de comprensión de quien escucha.
- Cierra la puerta a la sobreinformación. El hecho de estar permanentemente conectado no significa que estés mejor informado. La idea es no aumentar esa sensación de riesgo y nerviosismo
¿Y qué medidas puedo tomar para auto- cuidarme?
- La actitud es fundamental. Mantén una actitud optimista y objetiva.
- Sigue las indicaciones de las autoridades sanitarias en cuanto a los hábitos de higiene y prevención adecuados.
- No hables permanentemente del tema.
- Apóyate en tu familia y amigos.
- Colabora en mantener la calma en tu núcleo familiar y a procurar adaptar el pensamiento a cada situación.
- Elije fuentes oficiales e información contrastada de expertos: Ministerio de Salud, Organismos oficiales, OMS, etc.
- No difunda fake news, con esto estas alimentando tu miedo y el de los demás.
- Si estas en casa, reorganiza tu rutina y si aún no la tienes organiza una rutina en la casa. Intenta hacer vida normal.
- Presta atención a las conductas de rechazo o discriminación. El miedo puede hacer que tengamos comportamientos que sean discriminatorios o de rechazo frente a ciertas personas o colectivos.
Cuidando nuestra salud emocional estamos cuidando la salud emocional de quienes nos rodean. Si estamos en cuarentena hay que llevarla lo mejor posible. Intenta en la medida de lo posible comer bien, bañarte en la mañana (aunque no salga de casa), cumplir con tu rutina laboral (si está teletrabajando), comer a sus horas e intentar buscar un espacio para compartir con tu familia. Los niños necesitan la mayor normalidad: intenta jugar con ellos (juegos de mesa o inventar cosas), haz ejercicio en la medida que el espacio de tu casa te lo permita, incluso haz una rutina divertida de ejercicio con los niños en caso de tenerlos.
Todos conseguiremos acabar con este virus y cuando todo haya pasado nuestra salud emocional tiene que salir fortalecida. A seguir las indicaciones de los expertos.