En este post no solo vamos a explicarte por qué Panamá es un lugar ideal si estás planeando constituir tu empresa para tu “startup” sino bajo que tipo de figura jurídica debes hacerlo. Abre bien los ojos porque si buscas un sitio con flexibilidad, ventajas y condiciones para hacer crecer tu idea de negocio, Panamá es el lugar indicado.
De los dos tipos de entidades comerciales más populares en Panamá: la Sociedad Anónima y la Sociedad de Responsabilidad Limitada, para efectos de la puesta en marcha de tu startup la Sociedad Anónima es recomendable principalmente por su flexibilidad en la oferta de acciones al público. Tomar en consideración que la manera más común en la que una startup reúne capital o recibe inyecciones de capital para financiar sus operaciones es por medio del conocido “equity” o la venta de acciones a inversores, ya sean estos business angels o inversores de capital riesgo.
Si al momento de poner en marcha tu empresa decides hacerlo como una Sociedad de Responsabilidad Limitada, cada vez que vendas o cedas cuotas de participación a un inversor, deberás registrarlas en el Registro Público panameño. Así las cosas, cada una de las ventas o rondas de inversión debe ser registrada en el Registro. Otro aspecto para considerar es que aquellos socios de la Sociedad de Responsabilidad Limitada que hayan pagado en su totalidad sus cuotas de participación tienen el derecho a votar en las deliberaciones de esa Sociedad.
No obstante, a diferencia de la anterior la Sociedad anónima en Panamá si permite emitir o transferir acciones a través de documentos privados y, dichas acciones pueden ser de clases distintas y otorgar diferentes clases de voto. Este es relevante si se trata de ofertas públicas de acciones o incluso privadas. Menos trámites, menos costes, más agilidad.
Tomando en cuenta que el régimen tributario panameño se basa en el principio de la territorialidad que consiste en que tanto una persona natural como una persona jurídica pagará impuestos sobre la renta en Panamá únicamente sobre los ingresos que se generen dentro del territorio panameño, es decir, por medio de operaciones o actividades realizadas dentro de Panamá.
La normativa legal fiscal panameña menciona que las actividades como la dirección de operaciones que están siendo llevadas fuera del territorio, desde una oficina en Panamá y, distribuyendo los dividendos que proceden de ingresos no producidos en el territorio, por ejemplo, no dan lugar a ingresos en Panamá. Con esto queremos transmitir que una startup que se organiza bajo la Ley panameña solo pagaría impuestos sobre los ingresos generados por sus operaciones panameñas, esto hace que una empresa en su etapa inicial pueda ahorrar una cantidad de dinero considerable.
También existen leyes que exoneran del pago de ciertos impuestos y que conceden créditos fiscales, entre otros incentivos, a la fabricación industrial, la agroindustria, etc.; empresas que se localicen en la Ciudad del Saber, o en las zonas económicas especiales por ejemplo Panamá Pacífico, o algunas zonas francas.
Es cierto que la mayoría de las startups se caracterizan por la deslocalización de su personal. Incluso puede haber equipos repartidos por la faz de la tierra trabajando para un mismo proyecto. No obstante, en el caso de que, por alguna razón, se quisiera establecer un Headquarter, Panamá sigue siendo una opción viable, ya que, existen incentivos en el área de inmigración, como Permisos de residencia temporal para personal de confianza, ejecutivos, técnicos, etc. Esta facilidad es muy atractiva para empresas como las startups que pueden estar interesadas en contratar asesores o mentores en posiciones estratégicas para su empresa, guiando al fundador en las rondas de financiación.
Si estás pensando en constituir tu empresa para tu startup, Panamá ofrece ventajas muy claras, nosotros te ayudamos, contáctanos.